Consejos para ser más positivo: el poder del cumplido
Cambia tu forma de ver el mundo utilizando el poder de un cumplido sincero
¿Alguna vez has tenido la sensación de levantarte por la mañana y estar de mal humor o simplemente no estar de un humor especialmente positivo? Como cualquier objeto que se pone en movimiento, el buen humor necesita una fuerza inicial que lo impulse. La naturaleza tiende a empujarnos hacia la negatividad si no tenemos cuidado. El mismo principio se aplica a un jardín. Tienes que mantenerlo si no quieres que se llene de malas hierbas. Para estar de mejor humor, hay mil maneras de hacerlo. He aquí un consejo que quizá no hayas oído antes. Simplemente busca hacer observaciones positivas y sinceras sobre todo lo que te rodea. Lo ideal es verbalizarlo lo más posible para crear ese vínculo positivo con los demás. Ser proactivo a la hora de hacer cumplidos sinceros te dará un impulso de energía que te llevará a lo largo del día. Este poder de alabanza también debe dirigirse a uno mismo. Cuanto más seas capaz de ver las cualidades en los demás, más podrás ver las tuyas propias porque habrás cambiado tu software mental en cierto modo. Así que, entrénate, sé mucho más amable contigo mismo. No se trata de ser conciliador o narcisista, sino objetivo. Tenemos una verdadera tendencia a ser duros con nosotros mismos, lo que merma nuestro entusiasmo.
Recompénsese a sí mismo
Seguramente te esfuerzas mucho cada día. Tienes que recompensarte a ti mismo para crear un bucle de retroalimentación positiva. Define las cosas que te gustan y recompénsate cada vez que alcances un hito. No se trata (y de hecho no se debe) de regalarse sólo cosas materiales. Pueden ser cosas triviales como tomarse un descanso, un café, un paseo o regalarse un tiempo libre en el campo. Sea imaginativo. Mantener una dosis saludable de productividad significa estar alerta a las fluctuaciones de su moral. No tengas miedo de dejarte llevar, al menos durante un tiempo, si te sientes mal. Recompensar a los demás por su ayuda, cooperación o confianza. Para algunas personas, los cumplidos no importan demasiado, se comunican en el idioma que mejor escuchan (ver artículo).
Consejos para ser más positivo: cambia tu visión del miedo
Tengan miedo en lugar de dudas
Dudar te lleva a luchar para no perder, mientras que tener miedo te obliga a luchar para ganar. Esta es una gran diferencia y tienes que poner esta fuerza a tu servicio. La duda actúa en el córtex (la parte conceptual del cerebro) mientras que el miedo se origina en el cerebro reptil. El cerebro reptiliano es el más arcaico, el primero que se formó en la historia de la evolución humana. Está lleno de recursos de los que no somos conscientes. Es la parte del cerebro que mejor puede reaccionar en una crisis. El córtex, en cambio, es el producto de una evolución posterior. Puede ser paralizante por la procrastinación a la que puede llevar. El miedo es instintivo, nos impulsa a actuar la mayoría de las veces, salvo que nos petrifica, lo que puede ser un eficaz mecanismo de defensa.
Consejos para ser más positivo: No hay gente mala, sólo gente infeliz
Somos un reflejo de nuestro mundo interior. Una visión no compasiva nos llevaría a separar el mundo en dos grupos: los buenos y los buenos o incluso más dualismos (fuertes e incompetentes, etc.). Este enfoque de la vida nos obliga inevitablemente a construir muros entre nosotros y el resto del mundo. La separación entre las personas conduce a la falta de empatía y a la incapacidad de reconocer en los demás un poco de lo que somos.
Somos el producto de nuestro condicionamiento, nuestras experiencias y, por supuesto, en cierta medida, la expresión de nuestro ADN. Sin embargo, hay aspiraciones comunes en todo ser humano, agrupadas en torno a la pirámide de necesidades de Maslow. La incapacidad de subir los diferentes peldaños de esta pirámide puede crear resentimiento y, en última instancia, malestar. Esta infelicidad puede expresarse en la violencia o, al menos, en una forma de agresión. Por eso es importante distinguir a la persona de sus acciones, por muy malas que sean, porque son el resultado de una forma de ignorancia o angustia.
Debemos condenar rotundamente las injusticias que el ser humano puede causar. Sin embargo, hay que tratar de entender qué puede haber llevado a un ser a hacer tal o cual acción para recrear un vínculo con quienes pueden haber consentido tal bajeza. Esta conexión puede aportar inclusión y compasión a una sociedad y evitar un mejor entendimiento.
Cuando estamos inmersos todo el día en las emociones negativas del miedo, el odio o la ira, es difícil no actuar o hablar fuera de lugar. Cuando elegimos deliberadamente evolucionar en tales emociones, nos condenamos a seguir un camino infernal que nos llevará a más desgracias.
No siempre es fácil elegir la benevolencia o el apaciguamiento. Es bueno expresar una cierta cantidad de ira sin dejar que vaya más allá de los pensamientos o, a veces, de las palabras. Elegir no dejarse llevar por las emociones destructivas es la única manera de crear un mundo de armonía.